June Mathis [https://wfpp.columbia.edu/pioneer]
Cuando decimos que la
realidad siempre supera a la ficción, a menudo, nos quedamos cortos, porque la
vida es infinitamente más imprevisible que el más increíble de los plot twist
que nos podamos imaginar.
Ya
es difícil que una mujer en los años veinte fuera guionista o directora de
cine, pero afortunadamente las hubo, cosechando éxito y creando obras
emblemáticas de la historia del cine universal, pero aún es más difícil que dos
de ellas, siendo coetáneas, murieran de manera parecida y en ambos casos en los
lugares que representarían su experiencia laboral.
La
guionista alemana nacida en 1888, Thea von Harbou autora de los guiones de las
películas Los Nibelungos de 1924, Fausto de 1926, Metrópolis
de 1927, La mujer en la luna de 1929, M. el vampiro de Dussenldorf
de 1931 y El testamento del doctor Mabuse de 1933, fallecerá en 1954, a
la edad de 66 años, como consecuencia de una hemorragia interna tras caerse al
tropezar frente a una sala de cine.
Y
June Mathis, guionista estadounidense nacida en 1887 que realizaría decenas de
guiones, entre los que se encontrarían los de las películas Los cuatro Jinetes
del Apocalipsis de 1921, Sangre y Arena de 1922. Avaricia de 1924 y Ben-Hur de
1925 entre otros, morirá repentinamente a los 40 años de edad, mientras asisíia
a una obra de teatro. Noticia que The New York Times publicará el 28 de julio
de 1927 con el siguiente título: June Mathis heart victim.
La
casualidad de las muertes de June Mathis y de Thea von Harbou, en esos
especiales lugares, no pasaría desapercibida en su época, al igual que hoy su
consideración como una extravagante ironía del destino o una broma sarcástica
de la vida que nos recordará todo lo insospechado, inesperado y sorprendente
que nos podemos encontrar al doblar la esquina.
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